Los estragos que está provocando
la actual crisis económica: creciente desigualdad con una clase media cada
vez más empobrecida, la corrupción en todos los ámbitos e instituciones más relevantes,
la aparente impotencia de la POLÍTICA
para conservar el estado del bienestar y para hacer entender a la
ciudadanía lo que está pasando, el rescate multimillonario de los bancos con
cargo al bolsillo de los contribuyentes y por el contrario los recortes
en las políticas sociales en perjuicio de la ciudadanía, está generando una
gran desafección y desconfianza hacia la clase política y hacia la POLÍTICA con mayúsculas.
Esta hecatombe de sucesos y de
desafecciones hacia lo mayor parte de las instituciones, y la necesidad de políticas alternativas a una realidad frustrante, nos
obliga a dar pasos y respuestas que contribuyan entre todos a salvar la POLÍTICA como único instrumento hasta ahora validado
capaz de construir sociedades basadas en la palabra compartida y en la resolución de problemas sobre la base del gobierno de la mayoría y el respeto a las minorías.
Debemos reaccionar y adelantarnos, profundizando en la democracia, a propuestas populistas de “varitas mágicas” que pudieran llevarnos a
un mayor empobrecimiento de nuestros pueblos y a un mayor desprestigio de la
política por el desencanto y la frustración a la que nos llevaría lo irrealizable
de muchas de sus propuestas.
Y Ello requiere de medidas y de
actuaciones que concilie a los ciudadanos con sus representantes políticos. Los
gobernantes deben y debemos tomar cada
uno en sus ámbitos de responsabilidad, decisiones que posibiliten la creación
de espacios compartidos en la gestión de lo público a lo largo de los cuatro
años de mandato o legislatura, que reconcilien a la ciudadanía con sus legítimos
representantes y que posibilite un estado continuo de “rendición de cuentas”
por los representantes políticos y de “corresponsabilidad” por los representados.
En el ámbito local, diputaciones, mancomunidades y ayuntamientos, debemos de
rescatar el espíritu de los primeros ayuntamientos democráticos, poner las
nuevas tecnologías a disposición de una democracia más real y crear espacios
directos de participación entre administradores y administrados.
La información y la gestión de todo lo público pertenece a la ciudadanía. Da pena ver tantas páginas web de tantas instituciones y administraciones
públicas vacías de contenido, contaminadas de propaganda autocomplaciente, congeladas en el tiempo y sin ofrecer información
y participación a los legítimos dueño de “lo público”, como es la ciudadanía en
general.
Esta alcaldía, el equipo de
gobierno del ayuntamiento de Zahara, consciente de esa necesidad, en su
programa electoral llevaba un apartado dedicado exclusivamente a este aspecto
de la gestión municipal.

Y así lo estamos haciendo. Somos de los pocos
ayuntamientos que nos hemos dotado de una ORDENANZA propia que nos obliga a una
publicación activa en la información de los asuntos municipales y somos también de los pocos, que se obliga mediante
ordenanza a crear un CONCEJO estable de participación de la ciudadanía en los asuntos
públicos de la vida municipal.
LA DESIGNACIÓN DE LOS MIEMBROS DEL “CONSEJO VECINAL” CONFORME A LA
ORDENANZA MUNICIPAL SOBRE TRANSPARENCIA MUNICIPAL Y PARTICIPACIÓN CIUDADANA
DEL AYUNTAMIENTO DE ZAHARA DE LA SIERRA.
Un
total de 150 personas de nuestra localidad, elegidas de forma aleatoria y que representen a todas y
cada una de las calles/zonas y núcleos rurales/zonas de nuestro municipio, han sido elegidas por el Pleno de la Corporación para conformar lo que hemos venido en llamar el CONCEJO VECINAL, abierto a todos/as, presidido por el ALCALDE y al cual serán
convocados en tiempo y forma como mínimo cuatro veces al año para tratar sobre
los asuntos de la vida municipal agrupados en cuatro bloques:
a)
Presupuesto Municipal.
c)
Ordenanzas y Convivencia.
d)
Urbanismo y Servicios Municipales.
Dichos
vecinos/as tendrán derecho a asistir con derecho a voto , a ser informados sobre cualquier aspecto de la vida municipal y a participar en formas de
propuestas, preguntas, sugerencias y/o críticas a la Corporación Municipal.